El Lazarillo de Tormes inauguró el género de la novela picaresca. Relata las desventuras que un joven de origen humilde sufre al servicio de sus amos, entre los que se cuentan un ciego, un clérigo y un hidalgo pobre. Los avatares por los que pasa Lázaro son un magnífico pretexto para plasmar una ácida crítica a la sociedad de la época. Asimismo, el tratamiento de la anécdota, el lenguaje sobrio y eficaz, y una nueva concepción en el uso de los personajes propiciaron una renovación en la literatura del momento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario